Composición química
La composición fundamental del cabello está compuesta por Carbono, Oxígeno, Nitrógeno, Hidrógeno y Azufre, también encontramos un alto porcentaje en agua, sales y aminoácidos, así como su contenido en proteínas las cuales están formuladas en su mayor parte por la Queratina.
El pelo está constituido por queratina (proteína fibrosa), que contiene una alta cantidad de cisteína dentro de la cual se encuentra el aminoácido cisteína que tiene un átomo de azufre.
Las cadenas de queratina se acomodan de manera paralela, las cuales se mantienen unidas por medio de tres tipos de enlaces:
- Puentes disulfuro
- Puentes de hidrógeno
- Puentes salinos entre un ácido y una base
El agua tiene la capacidad de romper de manera temporal los puentes salinos y los puentes de hidrógeno.
El cabello está compuesto por: proteínas, lípidos, oligoelementos, agua, pigmentos y otras sustancias.
- 28% de proteínas
- 2% de lípidos
- 70% de agua, sales y otras sustancias (urea, aminoácidos, etc.)
Las proteínas capilares son en su mayor parte queratina. La queratina del cabello y de las uñas tienen mayor contenido en azufre, que la de la piel.
Podemos diferenciar entre dos tipos de queratina:
- La queratina dura presente en la corteza y en la cutícula.
- La queratina blanda que se observa en la médula del pelo.
Clasificaciones del cabello
La estructura de su folículo capilar determinará su tipo de cabello. Si ese tubo es pequeño, entonces tendrá pelo fino y si es grande tendrá pelo grueso. El pelo de una persona será liso si ese tubo es redondo, y será rizado si el tubo es aplanado.
Apariencia física:
- Liso, lacio o lisótrico. La forma del folículo es circular y está orientado verticalmente a la superficie de la piel formando un ángulo recto con ella.
- Ondulado o cinótrico. Tiene forma oval y está orientado formando un ángulo agudo.
- Rizado o ulótrico. Tiene forma elíptica y la orientación es casi paralela a la superficie de la piel.
En los caucásicos suele predominar el cabello liso ondulado, ya que en el folículo generalmente forma un pequeño ángulo agudo con la vertical a la piel.
El tipo lisótrico es muy característico de los orientales, mientras que los tipos rizados lo son de las personas de raza negra.
Grosor y Densidad del cabello
El diámetro: ¿sus cabellos son gruesos, medios o finos?
Para que una fibra capilar sea considerada gruesa o fina, se mide su diámetro, independientemente de la cantidad de hebras que una persona tenga en el cabello.
El diámetro del cabello humano varía entre 15 micrones (muy fino) y 170 micrones (extremadamente grueso), siendo entre 60 y 110 micrones el diámetro de la raíz en el cuero cabelludo.
El diámetro del cabello, en reglas generales, tiene un impacto significativo en cómo puedes peinar tu cabello. Cuanto más grueso sea el cabello, por ejemplo, mayor es la probabilidad de que adquiera frizz y se sienta áspero, por eso es esencial usar productos altamente hidratantes. En contrapartida, una estructura muy fina de cabello, al ser muy lisa y flexible, difícilmente mantiene un peinado o estilo creado por mucho tiempo, tendiendo a regresar a su estado liso natural.
Con independencia de la edad, de los factores ambientales y biológicos y de la herencia genética, la cantidad de cabello de una persona determinada varía según el color de cabello de esa persona. Así: una cabellera rubia tendrá un promedio de 50.000 pelos, una cabellera morena tendrá un promedio de 100.000 pelos y una cabellera pelirroja entre 80.000 y 90.000.
En función de su resistencia:
- Cabello fino: Debe su finura a un debilitamiento en la producción de queratina. Se encuentra generalmente en personas rubias o de cabello claro (castaño) y personas que tienen la piel fina.
- Cabello grueso: Debe su grosor a un aumento en la producción de queratina. Se encuentra normalmente en personas de cabello oscuro y moreno y está asociado a una piel gruesa.
Tipos de cuero cabelludo
La emulsión epicutánea, también llamada manto hidrolipídico, es una mezcla de sebo, sudor y células muertas que recubre la piel. El ser humano posee esta capa desde el momento de su nacimiento. La emulsión epicutánea tiene doble función. Por un lado, se encarga de mantener la hidratación de la piel; por otro, es la responsable de que la piel luzca ese aspecto aterciopelado característico.
En función de la composición de la emulsión epicutánea, la piel puede clasificarse en normal, grasa o seca, misma tipología que en el caso del cabello.
En función de su emulsión epicutánea, el cabello se puede clasificar en:
- Normal. La emulsión epicutánea está equilibrada. El aspecto del cabello es brillante, suave y aterciopelado.
- Seco. La emulsión epicutánea contiene poca grasa y poca agua. El aspecto del cabello es áspero y quebradizo.
- Graso. La emulsión epicutánea tiene alto contenido en grasa. El aspecto del cabello es brillante y pegajoso.
- Mixto:está entre un punto intermedio entre seco y graso. En este caso las raíces tienen mayor grasa y las puntas tienden a resecarse. Algunos cabellos grasos que sufren cambios por tintes, decoloraciones (químicos) se convierten en cabellos mixtos.
Factores como el sol, el viento, la contaminación, el tabaco y el alcohol, una mala alimentación o el estrés, debilitan el cabello y pueden acentuar o bien la sequedad o la producción de grasa.
Cuidados para cada tipo de pelo
Para lucir una melena sana y fuerte, lo primero es averiguar si tu pelo es seco, graso, mixto o normal. Esto es importante porque necesitarás usar productos capilares adecuados a tu tipo de cabello.
Si tienes el cabello seco, te habrás dado cuenta de que no necesitas lavarlo tan a menudo como el pelo graso, pues aguanta más. En el caso del cabello graso, quizás sientas la necesidad de lavarlo a diario por su aspecto apelmazado y grasiento.
Recuerda, además, utilizar agua tibia o fría cuando te aclares el pelo. El agua caliente es uno de los mayores enemigos del cabello y hace que sea más quebradizo. Para mantener el pelo limpio más tiempo, evita tocártelo con frecuencia, sobre todo si lo tienes graso.
Beber al menos dos litros de agua al día, descansar bien y llevar una alimentación apropiada son hábitos que, sin duda, contribuyen a la salud capilar.
La elasticidad del cabello
Es la propiedad más importante del cabello y puede variar su forma, longitud y diámetro cuando es aplicada una fuerza sobre él, volviendo a su forma original cuando cesa ésta.
Esta propiedad está relacionada con la mayor o menor unión entre las moléculas de la queratina, pudiendo verse afectada por algunos factores tales como la humedad, la temperatura, la radiación ultravioleta y algunas sustancias químicas.
La elasticidad puede llegar hasta una tercera parte de la longitud del cabello.
La elasticidad del cabello se debe a la estructura filamentosa de la proteína capilar: la queratina.
Cuando hay problemas con la proteína capilar se produce cambio o pérdida de la elasticidad del cabello.
La elasticidad puede verse afectada debido a la falta o exceso de proteína o de hidratación en nuestro cabello. Siempre debe haber un equilibrio entre proteína e hidratación para que la elasticidad sea la adecuada.
Una manera de saber si nuestro cabello carece de hidratación (humectación) o proteínas es haciendo la prueba de elasticidad capilar:
Coge una hebra de cabello limpia, mojada y sin productos y estírala. La facilidad con que se estira determinará el nivel de proteína:
- Si se rompe en seguida y casi sin estirar, es posible que el nivel de proteína sea demasiado alto.
- Si se estira un 30% antes de romperse, el nivel de proteína debería ser normal.
- Si se estira un 50% o más, es posible que necesite proteína.
Síntomas para identificar el nivel de proteína en el cabello:
- Exceso de proteína: cabello rígido, tieso, frágil, pajizo, con frizz y con tendencia a romperse. Debes realizar una hidratación profunda con una buena mascarilla hidratante y evitar la proteína hasta que la hebra se haya equilibrado.
- Nivel óptimo de proteína: el cabello está equilibrado y se estira correctamente. Nuestro cabello está fuerte y se encoge correctamente. En este caso, debemos mantener el equilibrio alternando hidratación y proteína sin excedernos en ninguno de los casos.
- Falta de proteína: el cabello está demasiado suave y blando, con frizz, un cabello sin fuerza al que le cuesta encogerse. Debes añadir proteína en tu rutina poco a poco con productos que la contengan para no excederte. Sería ideal realizar un tratamiento de hidratación profunda a la semana con una mascarilla que contenga proteínas.
Una elasticidad pobre significa maltrato en la fibra capilar debido a factores como:
- Procesos químicos
- Decoloraciones
- Calor excesivo
- Uso de malos productos capilares
- Falta de hidratación
- Aplicación de proteínas innecesarias
- Factores ambientales: playa, piscina, sol.
- Descontroles hormonales
- Alimentación inadecuada
Resistencia
El pelo es fuerte porque las células cuticulares están unidas entre sí con una sustancia química compleja que actúa como cemento y las mantiene también unidas al córtex.
El cabello es resistente a:
- La rotura: un cabello sano puede soportar una carga de 50-100 g; esto puede verse alterado por algunos agentes químicos.
- El calor: un cabello resiste temperaturas de 140 °C cuando está seco, y hasta 200 °C cuando está mojado.
- La putrefacción: la estructura de la queratina y su contenido en azufre hacen el cabello muy resistente.
- Cambios de pH: cuando la fibra capilar se somete a soluciones ácidas extremas o alcalinas extremas, se debilita.
Propiedades eléctricas
El cabello seco no es un buen conductor de la electricidad, y presenta una alta resistencia eléctrica.
Cuando se aplica peinado o cepillado, los cabellos acumulan electricidad estática y se repelen entre sí.